SERVICIOS

TALLER DE CHAPA Y PINTURA

TALLER MECÁNICO

MANTENIMIENTO DE AUTOMOVIL

En Taller JCars contamos con una gran trayectoria en este sector de la automoción, garantizándole unos resultados espectaculares.

Cuando tenemos algún desperfecto en la carrocería de nuestro coche, buscamos un taller de confianza. En Taller JCars eso le ofrecemos el mejor servicio posible en relación calidad-precio.

Nuestro taller de chapa y pintura le permitirá conservar su vehículo como el primer día.

Los vehículos sufren averías y dejan de funcionar correctamente según van pasando los años. Para repararlo y estar convencido de que el servicio va a ser bueno, es importante contar con un taller de confianza.

En JCars le ofrecemos un servicio con todas las garantías en nuestro taller mecánico. Contamos con un equipo de mecánicos especializados en el mantenimiento y reparación de todo tipo de problemas.

Taller de mecánica y electricidad que cuenta con la tecnología más avanzada para la reparación.

El mantenimiento periódico del vehículo es un requisito imprescindible para mantener las prestaciones y la vida útil de nuestros coches. Si no llevamos a cabo esta tarea cada cierto tiempo, podemos empezar a notar como los diferentes sistemas del coche van fallando.

Para que esto no ocurra, en Taller JCars ofrecemos un servicio de mantenimiento integral de todo tipo de vehículos.  Realizamos tareas de mantenimiento y reparación como limpieza del motor, cambio de aceite, revisión del estado de neumáticos, control de niveles hidráulicos y electrónicos o revisión del sistema de iluminación. 

REPARACIONES MÁS COMUNES EN TALLER JCARS

Sustitución del kit de embrague

Cambiar kit de distribución

Cambiar volante de motor

El embrague es clave para el buen funcionamiento del coche ya que éste asegura la conexión entre el motor y la caja de cambios permitiendo la circulación. Pero con el uso y paso del tiempo, éste se desgasta, ocasionando que patine y no transmita la potencia del motor a la caja de cambios, provocando una conducción peligrosa.

Para su sustitución hay que tener en cuenta las recomendaciones del fabricante, pero si se manifiestan síntomas como que el coche se revoluciona al cambiar de marcha, éste ha perdido fuerza o no puede con las pendientes, llegó la hora de visitar al mecánico.

 

El cambio del kit de distribución es la segunda reparación más contratada. Quizás el componente más conocido sea la correa de distribución, pero ésta no trabaja sola sino que va acompañada de poleas, tensores, bombas de agua, etc., formando así todo un kit que en su conjunto favorece el buen rendimiento del coche. Cuando uno de estos componentes se daña, lo más probable es que el resto de elementos relacionados con él también se vean afectados, por lo que antes de sustituir solo las piezas dañadas lo mejor es cambiar el kit al completo para que todos los componentes implicados en la distribución estén en perfecto estado.

Éste elemento trabaja para el correcto funcionamiento del vehículo ya que se encarga de acumular inercia y regularizar el movimiento del motor. Se trata de una rueda muy pesada colocada en el extremo del cigüeñal más próximo a la caja de cambios. El volante puede resultar dañado por hacer patinar el embrague de manera innecesaria. Las averías en el volante motor suelen generar ruidos molestos que son característicos con el motor en ralentí y al apagarse. Ante la sospecha de una avería, conviene realizar una revisión, con un poco de suerte el problema dependerá de otra parte del embrague y podremos sustituirlo a tiempo.

Cambiar pastillas de freno

cambiar la correa de distribución

Las pastillas de freno están sometidas a un intenso desgaste cada vez que se usa el coche. El buen estado de las mismas ayuda a frenar correctamente el vehículo, pero a medida que éstas se van desgastando pierde capacidad de fricción y el frenado deja de ser seguro. Por esta razón, es importante revisar el estado de las pastillas con regularidad y cambiarlas en cuanto sea necesario para poder frenar de manera óptima y conducir con total seguridad.

Puede pasar de ser una intervención menor a convertirse en la reparación más costosa del vehículo. La correa de distribución tiene como misión principal sincronizar el funcionamiento del motor y si no se tiene cuidado en su mantenimiento puede romperse y dejar inservible nuestro coche. Aunque en ocasiones su rotura es imprevisible, en otras sí se puede evitar. Para ello hay que tener en cuenta las recomendaciones de los fabricantes, que normalmente aconsejan cambiar la correa cada cinco años o una vez alcanzados entre los 80.000 y 120.000 kilómetros y estar pendientes ante cualquier ruido anómalo en el motor.